Resplandor eterno de la mente inmaculada

Resplandor eterno de la mente inmaculada. ¿Sería esa frase el detonante para que Charlie Kauffman escribiera es guión de esta película que nos ha llegado a España bajo el directo dítulo de "Olvídate de mi"?

Se puede hablar mucho sobre la película. Pero lo primero que pensé durante la proyeción fue lo adecuado que es el binomio Gondry - Kauffman. Un guionista complejo unido a un director visualmente capaz.

Aplicando el reduccionismo sólo estamos ante otra historia de amor. Amor con Clementine. Un amor normal. Pasado por la batidora cerebral de Charlie Kauffman. Amor videoclipero. La anestesia de uno dolor que tiene que ser necesario. La caleidoscópica mirada a la mente de un tipo gris. El reflejo deformado y maquillado de Charlie Kauffman. Un dulce para volver una y otra vez. Para degustarlo con cariño.